En el último episodio, la tensión estalló cuando Pangal nominó a Daniela para competir, justificando su decisión de manera polémica al expresar que prefería que una mujer enfrentara a Julia Fernandes en lugar de un hombre para añadir emoción al programa. Daniela, visiblemente molesta, recordó el momento en el que Pangal le había dejado claro que no eran amigos, sino simplemente conocidos, lo cual añadió más leña al fuego de la discusión.
Pero lo que realmente desencadenó la confrontación fue la crítica de Daniela hacia Pangal por su acento brasileño y cómo esto afectaba su autoestima al hablar en español. La participante se mostró afectada al sentirse cohibida por las constantes burlas sobre su forma de hablar. En su defensa, Pangal negó haberse burlado de ella y cuestionó las palabras que había utilizado para referirse a él, como "poco hombre" y "sapo". Daniela aclaró que el término "sapo" era parte de un juego y que sus comentarios sobre él se referían más a su falta de sinceridad que a su persona.
El intercambio de palabras llegó a su punto álgido cuando Pangal advirtió a Daniela sobre las posibles influencias negativas de otro concursante, Luis Mateucci. Ante esto, Daniela respondió afirmando que estaba cuidándose y dio por finalizada la discusión.
Esta polémica ha generado reacciones encontradas entre los seguidores del programa, algunos apoyando a Daniela por expresar sus sentimientos y defenderse de las críticas, mientras que otros respaldan a Pangal argumentando que sus comentarios no fueron malintencionados.
En un programa donde la competencia y las emociones están al límite, es inevitable que surjan conflictos entre los participantes. Sin embargo, es importante recordar que detrás de las cámaras, todos son seres humanos con sus propias emociones y vulnerabilidades.
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